En el año 1900 en África y en Asia había una población estimada de 500.000 rinocerontes, en la actualidad quedan 29.000 ejemplares, cifra que continúa descendiendo como consecuencia de la caza furtiva.
En los últimos cuatro años sólo en Sudáfrica, donde viven la gran mayoría de estos emblemáticos animales, los furtivos han matado más de 4.500 ejemplares, superando la cifra de tres animales por día.
En los resultados de la investigación llevada a cabo durante un año por la Elephant Action League (EAL) logrando infiltrarse en las propias redes de tráfico, se pone de relieve la corrupción existente en los mercados de China y en Vietnam por parte de los funcionarios ayudando a las redes de este tráfico ilegal, señalando que los propios traficantes, reconocen “la inminente extinción de los rinocerontes” y su pronóstico de que una década habrán agotado este mercado.
A pesar de que la ciencia médica actual, lleva años desmintiendo y divulgando entre la población china, que los cuernos de rinoceronte tienen la misma composición que las uñas de los humanos y ninguna capacidad para curar, el comercio ilegal de cuerno de rinoceronte continua alentado por la antigua creencia, de atribuirle propiedades curativas.
